El Verdadero Arrepentimiento 6
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jueves, 25 de marzo de 2010
¿POR QUE CRISTO TUVO QUE MORIR?
INTRODUCCION
I. El propósito de esta lección es ofrecer el contexto que da origen a la Pasión de Cristo.
II. Las últimas 12 horas en la vida del Señor Jesucristo fueron sumamente dolorosas e intensas; debido a ello, las conocemos con el nombre de “La Pasión de Cristo”.
A. Sin embargo, la Pasión de Cristo es el registro final de una historia muchísimo más larga; una historia que comienza varios siglos atrás. Permítanme hacerles una ilustración…
1. Imagínense ir a cine, y mirar los últimos minutos de una muy buena película.
2. Ahora, imagine que usted llega a casa y su familia le pregunta por aquella película.
a. Ellos ignoran que usted no vio toda la película; pero están inquietos por saber de qué se trata.
b. A ellos también les han recomendado la película, y esperan que usted les pueda adelantar algo de ella.
c. Toda la familia emocionada, se ha reunido en la sala de la casa para oír lo que usted tiene que decir sobre aquella inquietante película.
3. Entonces usted les dice: Pues no sé de qué se trató el resto de la película; pero el final es muy bueno.
B. Pues bien, más o menos esto es lo que sucede con muchas personas, quienes tan solo ven el sufrimiento de Cristo, pero no ven por qué sucedió; es decir, no miran el resto de la película.
1. Hace un par de años, Discovery Channel emitió una serie llamada “Las Escrituras”.
2. Uno de los capítulos de la serie tenía el sugestivo título ¿Quién asesino a Jesús?
3. Algunas de las personas entrevistadas en dicho programa, dijeron que Jesús murió por la avaricia de Judas Iscariote; otros dijeron que la razón principal fue la envidia de los sacerdotes judíos, encabezados por Anás y Caifás. Alguien más dijo que Jesús murió por la negligencia de Poncio Pilato; y hubo otra persona que dijo que el pueblo judío es el principal sospechoso de la muerte del Señor. De hecho, hubo un antropólogo forense quien dijo que Jesús mismo era el principal sospechoso de su propia muerte, pues aunque sabía que iba a morir, no hizo nada por impedirlo.
a. Como puede verse la Pasión de Cristo ha generado muchas teorías y especulaciones. Decenas de libros, miles de folletos, comentarios a granel, y hasta películas de cine y de televisión se han presentado con el fin de aclarar la Pasión de Cristo.
b. Sin embargo, la Pasión de Cristo hace parte de una historia mucho más compleja que es necesario reconocer.
c. Mirar la Pasión de Cristo y aislar el resto de la historia que la incluye; es como observar los últimos minutos de una muy buena película, y tratar de entenderla toda. ¡Imposible! ¿Verdad?
C. Pero si alguien quiere entender bien la Pasión de Cristo, al menos necesitará 3 cosas:
1. Para entender bien la Pasión de Cristo una persona debe conocer primero El Plan de Redención (salvación), porque la Pasión de Cristo es la conclusión de dicho plan.
2. Para entender bien la Pasión de Cristo una persona debe mirar primero la biblia; porque la Pasión de Cristo como el plan de redención se hallan en la biblia.
3. Para entender bien la pasión de Cristo una persona debe abrir primero su mente y su corazón, porque la Pasión de Cristo no es una historia aislada sobre una persona que vivió varios siglos atrás. La Pasión de Cristo es la historia de mi propia salvación.
III. Hoy veremos la Pasión de Cristo; pero la veremos a la luz de su contexto (dentro del Plan de Redención), la veremos a la luz de la biblia (la palabra de Dios), y espero que podamos observarla a la luz de nuestro propio beneficio, con el corazón y con el alma.
Los invito a abrir sus biblias y abrir sus corazones para conocer la verdad detrás de la Pasión de Cristo.
¡Bienvenidos!
DESARROLLO
I. Empecemos por el Principio.
A. Para entender una buena película debemos empezar a verla desde el principio; así, para entender correctamente la Pasión de Cristo, debemos empezar por el pecado.
1. Junto a la resurrección del Señor, la Pasión de Cristo ocupa las últimas líneas de los evangelios en el N.T.
2. Así, cuando llegamos a la Pasión de Cristo, ya se nos ha mostrado toda la vida de Jesús; sus palabras, sus acciones y su ministerio. Para ese momento ya se ha presentado a Jesús tal y cual es en verdad: El Señor, Dios hecho carne.
3. No obstante, mucho antes de la muerte del Señor, mucho antes de su terrible sufrimiento, mucho antes su ministerio, y aún de su nacimiento, hallamos una cantidad de información y de situaciones notables, todos ellos relacionados en una misma línea de pensamiento, los cuales conocemos como el Antiguo Testamento.
a. Ahora bien, el Antiguo Testamento es la narración de una serie de eventos que confluyen en el sacrificio de Jesucristo.
b. El apóstol Pablo mostraba al A.T. como aquel guía que nos conduciría hacia a la gracia de Dios; Gál. 3.24 “De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe.”
c. Así entonces, debemos remontarnos al A.T., al mismo Génesis de las cosas para poder esgrimir o conocer mejor la historia de la Pasión de Cristo.
II. El Problema del Pecado.
A. Cuando vamos al principio mismo de las cosas; a la creación del hombre, podemos observar el poder y el amor de Dios.
1. El poder de Dios porque todo fue creado por El a través de su palabra; Gn. 1.1 “En el principio creó Dios los cielos y la tierra.”
2. El amor, porque todo lo creado por Dios fue hecho para provecho o beneficio del hombre; Gn. 1.31a. ”Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera…”
a. La condición del hombre era excepcional, pues a diferencia de las demás criaturas; solo él había sido creado a imagen y semejanza de Dios; Gn. 1.27.
b. Era excepcional también porque Dios puso al hombre como cabeza de la creación; solo Dios mismo estaba por encima de él; Gn. 1.26.
c. Era excepcional porque el hombre disponía de toda la creación para su beneficio; Gn. 1.29-30.
d. Era además excepcional porque el hombre habitaba en un precioso jardín, diseñado por Dios mismo; Gn. 2.8, 15.
e. Era excepcional porque Dios había dado al hombre una buena compañía; Gn. 2.22.
f. Era excepcional porque el hombre disponía del árbol de la vida; Gn. 2.9.
g. Y era excepcional sobre todo porque el hombre habitaba en la presencia de Dios (véase todo el contexto de Gn. 1—2).
3. Sin embargo, aun en el jardín del Edén, el hombre tenía sus limitaciones o restricciones. Dios había dado una orden específica al hombre la cual debía ser cumplida a cabalidad; Gn. 2.16-17 16Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; 17mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.
B. Todo marchaba muy bien hasta que el hombre decidió desobedecer al mandato divino. En Gn. 3 se nos presenta el relato de la caída del hombre. Quisiera hacer énfasis en Gn. 3.6 “Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.”
C. A partir de ese momento, la condición del hombre cambió radicalmente…
1. El hombre tuvo conocimiento de su desnudez y esto mismo le llevó a la vergüenza; Gn. 3.7.
2. El hombre se escondió de la presencia de Dios; Gn. 3.8.
3. El hombre se sintió temeroso; Gn. 3.10.
4. Pero lo peor que sucedió al hombre fue precisamente lo que Dios le había advertido, su muerte. Por un lado el hombre fue separado de la presencia del Señor; por otro, fue separado del árbol de la vida; Gn. 3.22-24 “22Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. 23Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. 24Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.”
D. Ahora bien; cuando el pecado hace su presencia en el contexto de la creación, este propicia u origina dos condiciones no vistas antes en el carácter de Dios: la santidad y la justicia divinas.
1. Por causa de su pureza y santidad Dios no podía (por más que quisiera), ignorar o desconocer el pecado cometido por el hombre; Hab. 1.13a. “Muy limpio eres de ojos para ver el mal, ni puedes ver el agravio…"; Sal. 5.4 “Porque tú no eres un Dios que se complace en la maldad; el malo no habitará junto a ti.”
2. Así entonces, queda abierta la puerta para el juicio divino, por causa del pecado cometido por el hombre; Nah. 1.3a. “Jehová es tardo para la ira y grande en poder, y no tendrá por inocente al culpable…”
3. Sin embargo, el pecado del hombre no solo manifiestan la santidad y justicia divinas; con él también se abre otra puerta, la misericordia de Dios.
a. Tal como Dios le advirtió al hombre, el pecado trajo la muerte; Gn. 3.19; Ro. 3.23.
b. Por causa de su pecado, el hombre merecía morir; sin embargo, Dios en su inmensa misericordia provee la forma de mostrar su justicia, pero sin cobrarse la vida del hombre (expiación), ya que el pecado se cobra con sangre; He. 9.22 “Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.”
c. Es allí precisamente donde aparece la figura de Jesucristo, como la persona que toma nuestros pecados para hacernos libres de la justicia divina, y objeto de la misericordia de Dios; Ro. 5.6-8 “6Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. 7Ciertamente, apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. 8Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.”
III. La Solución del Problema.
A. Ahora sí estamos preparados para tratar con la Pasión de Cristo.
B. Como puede verse, la Pasión de Cristo hace parte del desarrollo de un plan diseñado por Dios mismo desde la eternidad, para llevar a cabo nuestra salvación; Ef. 1.3-7.
C. Cuando vemos el terrible sufrimiento del Señor, tenemos que dar gracias pues a través de él se nos da evidencia del pecado, la justicia, la misericordia, el amor y la gracia de Dios.
1. Al morir por nosotros, Cristo se hace objeto de la justicia divina y del castigo consecuente por el pecado.
2. Sin embargo, al morir por nosotros, Cristo nos hace objeto de la comunión con el Padre, una comunión que se había roto por causa del pecado cometido; 2Cor. 5.19a. “Que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados...”
3. Pero además de todo ello, al morir por nosotros, Cristo se hace el objeto tangible de la misericordia de Dios para con nosotros. La mejor muestra del amor de Dios es Jesucristo mismo en la cruz del calvario.
CONCLUSION
I. La Pasión de Cristo no es una historia aislada sobre el sufrimiento del Señor. Para entender correctamente la Pasión de Cristo no es necesario abrir la biblia y el corazón, para entenderla correctamente su contexto.
II. La Pasión de Cristo es el broche de oro de un plan maravilloso, diseñado por Dios desde antes de la fundación del mundo (Ef. 1.3-10).
III. La Pasión de Cristo es la muestra fehaciente del amor de Dios para con el hombre.
martes, 23 de marzo de 2010
domingo, 21 de marzo de 2010
martes, 9 de marzo de 2010
jueves, 4 de marzo de 2010
ANDA CON CUIDADO
Estimados hermanos y lectores. He notado que a través de estas páginas, se creean varios enlaces en las presentaciones publicadas. Quisiera informar que esta situación se escapa de mis manos, y mucho más cuando no estoy necesariamente convencido de los enlaces que se añaden. Por esta razón, les ruego sean diligentes en leer y discenir la información contenida tanto en este blog, como en los enlaces adjuntos, ya que sencillamente estos son estudios, comentario o presentaciones humanas, basadas en la palabra de Dios, pero no excentas de investigación o estudio, para su comprobación bíblica.
Por esta misma razón, quisiera recordar a todos el notable ejemplo de los creyentes en Berea, quienes a pesar de ser instruidos por el apóstol Pablo, "...Escudriñaban cada día las Escrituras, para ver si estas cosas eran así".
Muchas gracias por su visita y comentarios.
En El
Julio
Por esta misma razón, quisiera recordar a todos el notable ejemplo de los creyentes en Berea, quienes a pesar de ser instruidos por el apóstol Pablo, "...Escudriñaban cada día las Escrituras, para ver si estas cosas eran así".
Muchas gracias por su visita y comentarios.
En El
Julio
miércoles, 3 de marzo de 2010
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